viernes, 1 de mayo de 2015

ESPAÑA, EL REINO DE LA SEGMENTACIÓN

Primero de mayo, quién te ha visto y quién te ve, con el paro y la corrupción encabezando las mayores preocupaciones de los españoles. ¿Más que la Liga y las procesiones? No puede ser. Siendo, las de paro y corrupción, cifras de record europeo, hay mucha gente en la playa y en la montaña, o en el bar de la esquina, o en la próxima romería. Para qué afanarse, dice el españolito, si en el Congreso de los Diputados han descubierto la pólvora: no es lo mismo legalidad que ética. Y bastantes diputados, jueces, embajadores, comisarios, alcaldes, jefes de empresas públicas y privadas (que en España todo va al bote), paterfamilias y materfamilias, con sus correspondientes primofamilias y cuñadísimos (línea hereditaria desde Serrano Suñer), se deshacen en explicaciones: hemos podido ser poco o nada éticos, pero legales, eso a machamartillo. Hasta ahí podríamos llegar. La mano en la nuca de Rato, las tarjetas black, el espejo español que devuelve la Corporación de RTVE,  los niños españoles que no comen, todo eso está ahí este Primero de Mayo, como lo estará a este paso el 24 de Diciembre, saca la zambomba, María. ¿Por qué no hacer apadrinamientos de niños españoles, para que puedan comer dignamente, como se hace con los niños de la India y otros países? Seguro que todos esos sutiles políticos bizantinos nuestros, que no ven que sea igual legalidad y ética, echarían un poco de dinero de sus blacks para el niño español hambriento, que naturalmente no existe. Tampoco existen los mendigos en Madrid si son previamente barridos. Mussolini ponía incluso magníficos decorados de cartón-piedra en las calles donde iba a circular Hitler para que viera la potencia italiana. En España hay segmentación como acuñó Evans-Pritchard para los nuer y los beduinos de la Cirenaica. Es el reino de los subgrupos ante una ausencia de Estado o un Estado raquítico. Es también un modelo, claro, si no hay otro.


www.luispancorbo.com
www.otrospueblos.com

4 comentarios:

Patricia dijo...

Buenas tardes,

La verdad es que por estos pueblos norteños, somos bien expertos en oligarcas, caciques y asimilados, tenemos desde los herederos de aquel ministro de fomento del siglo XIX llamado Zar de Asturias, como así denominó Clarín a Alejandro Pidal y Mon, hasta los que este nuevo milenio, acuden a las romerías y jiras obreras a dar sus discursos de salvación.

Fernando García Arenal, ingeniero de la burguesía avanzada de ese siglo XIX, decía que en las romerías los trabajadores eran más dados al vino y a la sidra que al baile, a la vez que en la Semana Popular Ilustrada, promovida por el marqués de Comillas, se avisaba sobre los estragos del alcohol, pues bien, aún somos la comunidad con más bares o chigres por habitante, quizás por esa naturaleza escéptica en la que llegamos a afirmar "Si tien arreglu, s'arreglará; si nun lu tien, arregláu ta" o en la que estamos más preocupados por los cojines donados a Cáritas sin la autorización del ex director del FMI, historia rocambolesca donde las haya, como así la describe la prensa.

Y como sabemos que quien no tiene padrino, no se bautiza, ni aún de mayor, se casa, sirva este pequeña estrofa que según nuestra tradición oral se sitúa en la zona de Somiedo:

La pulga ya’l piojo se quieren casar,
por falta de pan lo van a dejar.
Salió una hormiga de su hormiguero:
–Casen, señores, que soy panadero.
–¡Ole, morena!, pan ya tenemos,
ahora padrino ¿de qué lo haremos?
– Salió un rato de su molino,
casen, señores, que soy el padrino.
–¡Ole, morena!, padrino tenemos,
ahora la madrina ¿de qué la haremos?
– Salió una palomba de esquina a esquina:
–¡Casen, señores,que soy la madrina!


Ya vemos, quién tiene padrinos se esposa, come y engorda....Por lo demás,sólo esperamos que no se cumpla la predicción con la que finaliza La aldea Perdida de Palacio Valdés (...) «Decís que ahora comienza la civilización [...], ¡yo os digo...oídlo bien... que ahora comienza la barbarie!»

Un saludo,
Patricia

Benito dijo...

Si extendemos el lema de la película Plácido de Berlanga: Siente un pobre en su mesa, al menos el “problema” de los mendigos se solucionaría durante unas horas y no sería necesario ir a mayores como algunos proponen, ya se sabe, el huevo de la serpiente siempre está preparado para eclosionar, no es necesario darle escusas.

Ahora Mussolini ya no pone escenarios de cartón-piedra, pero casi seguro que la Expo de Milán, resulta bastante más cara que ningún escenario. No hablemos de mordida y similares que ¿haberlas haylas?. Eso si, tal vez esos dirigentes que atisban diferencias entre legalidades y éticas, consigan convencernos de la bondad de unos macroproyectos, que traen según ellos trabajo, dólares de turistas y además nos quedarán esas fantásticas infraestructuras para la posteridad y mayor gloria de las que las encargan, al menos hasta las próximas elecciones.

Parece que se quiere centrar el debate entre las cuestiones legales y las éticas, pero ¿por qué no puede ser legal y ético? ¿por qué las cosas deben estar tan polarizadas?... Evans-Pritchard estudiando la danza zande observaba rivalidad, competición, peligros de enfrentamiento... En oposición Radcliffe-Brown analizando las danzas en la islas de Andamán ofrecía una visión armónica. Versiones estereotipadas y opuestas, tal vez lastradas por el etnocentrismo de ambos autores. Deberíamos reflexionar si nosotros también, y no digamos nuestros políticos, tenemos una venda en los ojos que nos impide apreciar las distintas realidades. Ya se sabe que sin ser consciente de algo, mal se pueden fijar criterios para cambiar nada.

En cierta medida los estudios de Bourdieu sobre la casa bereber pueden servirnos para arrojar algo de luz sobre España. Bourdieu analizaba las casas, no como meros espacios físicos, sino cargadas de sentidos y sentimientos. Las casas como los lugares y por extensión los países, no están constituidos sólo por lo físico, son el resultado de construcciones sociales y culturales. Las distribuciones espaciales definen rangos y por tanto ordenación y subordinación, que se reflejan y manifiestan de distintas maneras. La España física, nos cobija a todos, pero la España de los rangos, distingue muy mucho entre los mendigos y los que manejan y manipulan el país.


Saludos,
Benito

Luis Pancorbo dijo...

Qué bien lo dices, Patricia, y con esa poesía popular de Somiedo. Y todo lo demás que nos cuentas siempre con buen humor.
Lo más grave es que va a empezar la barbarie, como se dice en la novela de Palacio Valdés. Pero me pregunto si llegó previamente la civilización, a la que la barbarie va a sustituir.
Lo que seguro ha venido por estos pagos es una busca compulsiva de padrinos, desde la hormiga al rato, para hacer el matrimonio entre la pulga y el piojo...
Es como se dice popularmente allá: "Espabila, Favila, que viene el oso". Y hay quien quiere reeditar el bipartidismo, incluso hacer un gobierno de Grosse Koalition. Se ha demostrado que este sistema postransicional español hace aguas (no me extraña con lo que se chupa desde arriba abajo) y aún vienen los vendedores de parches y de crecepelos a anunciarnos una regeneración light, una que no perjudique el chollo familiar, ni las esencias. Otros parecen más resueltos en su discurso de cambio, pero hay que ver primero para creer.
La decadencia sólo está a un paso de la barbarie. ¿Quién va a regenerar esto si no se perfila en el horizonte un Giner de los Ríos? Y si aparece un Giner, que no esté ya en una cuenta, ¿cuánto durará vivo en el país de la alegre romería?
Millones de turistas se deshacen en elogios sobre España, eso da que pensar: a lo mejor los españoles deberíamos imitar a los extranjeros, venir aquí sólo de vacaciones, o tomarse el país como una vacación eterna. Trabajar, intentar hacerlo, y encima en un reino de justicia y eficiencia, eso es pedir mucho. El oso de Favila ya echa humo por las narices en nuestras espaldas.

Un abrazo
L.P.

Luis Pancorbo dijo...

Bien dices, Benito, que en Italia también tienen lo suyo. Superaron el tiempo de Mussolini, pero es un país con incrustación de otros dos Estados, como el de la mafia y el Vaticano.
Cada cual tiene su cruz, se decía antes. O un puñado de ellas.
Es muy oportuno también lo que nos traes de Pierre Bourdieu sobre la maison kabyle, ese tipo de casa beréber, y su construcción que evoca los rangos sociales.
Ya sugerí en entradas anteriores que en nuestro país la cabila sigue siendo una unidad de comprensión. Las cabilas españolas han ido variando con el tiempo, pero no en lo fundamental, que es cimentar subgrupos sociales que giran a su aire aunque sea dentro de un sistema ahora de autonomías.
Pero sin duda ha sido Ernest Gellner en "Antropología y Política" (1997) quien puntualiza de forma luminosa la idea de la segmentación, la cual en buena medida se popularizó gracias a los trabajos de Evans-Pritchard. Trabajos que, aparte de los relativos a los nuer, tuvieron mucho que ver con los beduinos de la Cirenaica (en Libia oriental). El resultado de segmentación en la actual Libia parece ratificar las intuiciones del antropólogo británico a principios del XX. Hay una serie de subgrupos (cabilas para entenderse).las cuales no tienen sentido alguno de Estado. Es más, la ausencia de Estado es lo que caracteriza la segmentación. Como dice Gellner, los jefes mantienen la disciplina interna de esos subgrupos, y son responsables de las fechorías de sus miembros. "La oposición de subgrupos asegura análogamente el orden interno". ¿Hay una posible traducción? Veamos que dice Gellner de esa segmentación: "Las enemistades de clanes, el juramento colectivo, el pago compartido y la recepción y distribución del dinero de sangre son las formas naturales de las relaciones legales en tal sociedad".
Aquí, claro está, el dinero más que de sangre es de francos suizos que no manchan. Pero por lo demás la patria es la moneda. Y la región, y la ciudad, ya todo eso es una unidad hasta demasiado grande para dedicarle lealtad. El reparto del botín, hecha la razzia, es un círculo más estrecho.
Un abrazo
L.P.
U