domingo, 24 de octubre de 2010

ALLA VAMOS, OTRA VEZ

"Allá vamos, otra vez" ("There we go") no va de política española, que cambia tanto como el Gatopardo. Es un libro de Oren Ginzburg que dice con toda eficacia y rapidez que el desarrollo (sostenible, comunitario, participativo, y demás hierbas) es un enorme perjuicio para muchos de los llamados pueblos primitivos. Eso es lo que sostienen organizaciones que saben de lo que hablan, como "Survival". Todo un anatema, por supuesto, para quienes piensan que no hay nada mejor que el sistema capitalista occidental, con su parte social y benigna, incluidas las pensiones (cuándo y si se cobran), el paro (parte inherente al sistema dado que no hay trabajo digno para todos), más los habituales chanchullos, el nepotismo, el folclore comarcal, y enjuagues varios. Con la eficacia como bandera y la limpieza de fijador. Pues bien, allá vamos, otra vez. Los bosquimanos viven menos que antes, les quitan sus tierras (con algunos diamantes), y su futuro se tiñe de sida y alcoholismo: viven menos años que antes de ser redimidos. Los inuit de Canadá hasta los años 60 eran autosuficientes. Cuando empezaron a salvarlos (y de paso sus minerales) perdieron su autoestima con los consiguientes problemas de alcoholismo, droga, suicidios... Es lo que tiene la felicidad blanca, y no menos, la española: allá vamos, otra vez. Cómo no.

Otras informaciones y sugerencias:
www.luispancorbo.com
www.otrospueblos.com