viernes, 12 de octubre de 2012

ALIMENTOS CADUCADOS

En Grecia acaban de permitir que los supermercados vendan alimentos caducados. Serán más baratos, un tercio menos, y si en su fecha de caducidad pone el día, se dejará aún venderlo una semana más. Si pone la indicación del mes de caducidad se prorrogará otro mes. Y si el alimento solo indica el año de caducidad, aún habrá tres meses para venderlo. No se permitirá usarlos en los restaurantes. Y eso es un poco lo último que hay de Grecia, y de su 25% de paro y de su 54% de paro juvenil, que no hay quien pare la tragedia digna de tener un Sófocles para que alguien se conmueva. En Italia al menos ya van por 310.000 las firmas recogidas para promover una ley Anti-Corrupción. Pero una ley de aprobación inmediata en el Parlamento, nada de que tenga que esperar a ser aplicada por los jueces. Una ley de emergencia, promovida por "La Repubblica", un diario que aún cumple con su deber, y apoyada por gente tan sospechosa de ser anti-patriota como Umberto Eco, Claudio Abbado o Marco Bellocchio. Es decir, de lo mejor que tiene ese país pero que ya no puede seguir fingiendo que esto - o sea, aquello, lo grecorromano, claro- se cura con palmaditas, verborrea, compadreos, chanchullos y chapulines varios. ¿Hace un yogur desnatado de hace un par de meses? Venga, a por ello, Don Camilo.

www.otrospueblos.com
www.luispancorbo.com

4 comentarios:

Patricia dijo...

Buenas tardes,

En estos días llenos de noticias contradictorias, por un lado concesiones de premios de un millón de euros, y otras, que sitúan a uno de cada cuatro niños en España por debajo del umbral de la pobreza, seria interesante recordar al historiador Eric Hobsbawn, fallecido recientemente y cuyos estudios sobre las culturas, organizaciones, lucha de clases, etc, a lo que denominó “mundos del trabajo”, no han sido muy tenidas en cuenta, a pesar de estar finalista en los Premios Principe de Asturias en varias ocasiones.

Que interesante noticia nos traes Luis, alimentos caducados, aunque se puede ver desde otro prisma, los supermercados van a ganar dos tercios por algo que o bien iban a devolver a los distribuidores o simplemente a tirar, no suena muy humanitario, quizás tengamos en ejemplos más cercanos, como en la fiesta otoñal de Los Humanitarios de Moreda, tradición y solidaridad, recordando la unión de agricultores y ganaderos en el pasado siglo ante la administración, a la vez que ayudaban desinteresadamente a los más necesitados.

Mientras, ¿qué será lo próximo que nos intenten vender?, hipotecas para casas sin techo...quizás.

Un saludo,
Patricia

Benito dijo...

Una de tantas paradojas, la Europa del Premio Nobel de la Paz, la misma que en Grecia permite vender alimentos caducados, podríamos preguntarnos: ¿qué son los europeos?... Son igual de europeos los de las colas de los comedores sociales a los de los yates de Puerto Banús o Cerdeña.

Entre tanto mio/tuyo, norte/sur, acreedores/deudores, ... Recordar como hace Oscar Calavia, a propósito de los Cayapo, que hay gentes que no tienen denominación para sí mismos. ¿Para qué llamarnos a nosotros mismos sí ya sabemos quienes somos? ¿Hay categorización sin denominación?... La Europa del siglo XXI que rima demasiado con la del siglo XX.


Saludos,
Benito

Luis Pancorbo dijo...

En efecto, Patricia, esa noticia de que en Grecia ya permiten vender productos caducados en los supermercados, en estanterías aparte y con un 66% de rebaja, me pareció digna de ser comentada como una forma más que tiene el sistema de retorcerse y sacar beneficio. ¿Para qué tirar algo a la basura? ¿Para qué confiar en las ONGs? El super se convierte en capitalismo de beneficencia,gana de paso unas perras, y a este paso igual hay que volver, como dices, a esa sociedad de Humanitarios de Moreda. En África Occidental funcionan las tontines, sociedades de socorros mutuos, dado que el Estado no llega, en el barrio o en el pueblo la gente se ayuda para una operación, un entierro, una emergencia... Vaya panorama.
Ayer vi "Cosmópolis" de David Croneberg, basada en una novela casi profética de DeLillo. Tremenda película (el final se adensa y extravía un poco) donde los tiburones capitalistas parecen pulpos perdidos en un garaje, o en una limusina... El umbral de la miseria en Grecia alcanza ya el 27%de la población. Menos mal que el 73% restante no come productos caducados, supongo.

Saludos cordiales
L.P.

Luis Pancorbo dijo...

Vaya debate, Benito, ¿hay categorizacion sin nominación? me voy quedando con que los nombres son antes que las cosas. En filosofía hay un nominalismo, muy re-re-elaborado por supuesto, que antecede al empirismo. Primero se especula, se piensa, se nombra y así se conoce de lo que se habla. Luego viene Galileo Galilei y comprueba con su telescopio que la Tierra no es más que otro planeta. Los indígenas que pasan de autollamarse -los cayapo según la idea de Calavia que nos trasladas- suponen un tema curioso. Ya sabes que muchos pueblos no se llaman ni de lejos con los nombres que les han puesto los otros, los vecinos, los colonizadores, etc... Ellos son simplemente la gente, nosotros, los paisanos... La humanidad. Los demás no existen. Y si lo hacen es desde luego para ser inferiores. Eso está a la orden del día en la selva verde y en esta otra.

Saludos cordiales
L.P.