domingo, 20 de noviembre de 2022

OCHO MIL MILLONES

Ya somos ocho mil millones de habitantes en el planeta. Enhorabuena a todos los que vivimos. No somos “unidades con base de carbono”, como dicen las máquinas vivas de los humanos en Star Trek. Otra cosa es que la democracia y la igualdad escasean en Oriente y Occidente, al igual que el agua y el trigo. Gas hay de sobra, a precio de oro, claro. Los españoles, con baja natalidad, hemos recibido una inyección con la hinchada catarí contratada para cantar: “Yo soy español, español…”  Hay superpoblación, pero Malthus no tenía razón: queda margen para procrearen el metaverso. Hay guerra inflación y virus, contaminación y estancamiento. Pero no escasean las mamandurrias y afines. Al menos Einstein acertaba: “En tiempos de crisis sólo la imaginación es más importante que el conocimiento”. Entonces vamos al cielo. A la orden, almirante Kirk, James Tiberius Kirk.

 

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6 comentarios:

B Fernandez dijo...

Ahora hasta al metaverso le sobra personal para desarrollarlo. Como siempre se dice, todo no se repite pero sigue rimando. Algunas cosas del pasado vuelven, en torno al 1900, en Francia la especulación del precio en los productos básicos fue tal que las familias menos pudientes no se podían permitirse el lujo de comprar ni mantequilla. Ejércitos de miserables pululaban por los extrarradios de París y mientras los mega fastos de la Exposición Universal de 1900 y sus resacas, con lo último en tecnología, aunque los metaversos de aquella época eran de otra manera, también parecieron existir.

Maurice Godelier analiza los periodos de cambio y se refiere a ellos como: "Se designa con la expresión «período de transición» una fase particular de la evolución de una sociedad, la fase en la que ésta encuentra cada vez más dificultades, internas o externas, para reproducir las relaciones económicas y sociales sobre las que reposa y que le dan una lógica de funcionamiento y de evolución específica y en la que, al mismo tiempo, aparecen nuevas relaciones económicas y sociales que van con mayor o menor rapidez, con mayor o menor violencia, a generalizarse y convertirse en las condiciones de funcionamiento de una nueva sociedad." ¿Estamos ante nuevas relaciones económicas y sociales?¿Se intensifica la violencia?¿Estamos ante una nueva sociedad? Y si es así, ¿Qué nos depara esta?¿Ejércitos de nuevos parias?¿Un planeta devastado?… Eso si, que no falte el circo, en Qatar o en el ciberespacio.

Los infiernos en palabras de María Zambrano: “...El Infierno es uno. Y sin embargo, cada época parece tener el suyo, intransferible con el de ninguna otra; cada hombre ¿no tiene el suyo a su vez?…” y la bondad en las de Neruda: “… Los buenos serán los que más pronto se liberten de esta mentira pavorosa y sepan decir su bondad endurecida contra todo aquel que se la merezca. Bondad que marcha, no con alguien, sino contra alguien. Bondad que no soba ni lame, sino que desentraña y pelea porque es el arma misma de la vida…” Sobre los hombros de gigantes, tal vez, se vislumbre un poco más.

Un saludo,
Benito Fernández

Luis Pancorbo dijo...
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Luis Pancorbo dijo...

No sé, Benito, si este es un "período de transición", como decía Godelier. O si la transición ya llegó hace años y aún no la hemos digerido con todo su entorno cibernético, digital y meta y post todo, que envuelve las heridas de este viejo planeta. Tienes razón al preguntarte, y preguntarnos, por las incógnitas sin resolver. Pero sin entrar en la catalogación de los nuevos infiernos, y paraísos, está claro lo desdichado de un mundo donde empieza un Mundial, como el de Qatar, que refulge más que el similor,, y que aún no se sepa cuántos miles de esclavos murieron construyendo esas piránides rectangulares llamadas estadios de fútbol. No es preciso qe las rieguen con más sangre humana, pero el agua que ahí se derrocha es un insulto para quienes sobre todo en África, Asia o América, no tienen ni un charco donde lavarse las manos. Abruma, cada vez más, la ecuación desigualdad y superpoblación, y contaminación del pllaneta, con los magnates y guerreros mundiales tocando la lira. ¿Cómo se llama el ideólogo Nº1 de este infierno?Igual es que el infierno es sartriano, y son los otros.
Un abrazo
L.

PF dijo...

Buenas tardes,

Dicen que cuando en noviembre truena, la cosecha será buena….¿para quien? ¿para las distribuidoras? ¿para las corporaciones?...y sobre todo, tras la aprobación del consumo de pollo artificial por la agencia que regula los alimentos en EE.UU., ¿como será la comida del metaverso? ¿se hará en impresoras 3D?...no lo sé, demasiado para una tarde de domingo y con las navidades a la vuelta de la esquina. Escribía el dramaturgo Bances Candamo en “El esclavo en grillos de oro”:

¿Por qué tú, gloriosamente
robas también con tirana
sed? Si en tu oficio y el mío
no se encuentra mas distancia
que porque yo con un leño
humilde robo, me infaman
(aun siendo mayor mi arrojo)
con el nombre de pirata,
y a ti te dan el de Rey
porque robas con armadas
..

Esto parece que nos lleva a pensar que en la vida como en la política, lo único importante es el resultado… Pero:

-Ahora que usted me lo pregunta-dijo Alicia, que se sentía terriblemente confusa, debo reconocer que yo no pienso...-¿Pues si no piensas, cállate! -la interrumpió el Sombrerero.

Así que también me callo, y lo último, parafraseando a Carrol usemos nuestra imaginación, es la única arma en la guerra que podemos usar contra nuestra realidad, esa que nos prepara para otro viernes negro o un nuevo adviento, que cada cual elija.

Un saludo,
Patricia Fernández

Luis Pancorbo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Luis Pancorbo dijo...

La comparaiva que nos traes, Patricia, de Candamo no puede ser más actual, y sin mirar por eso hacia algún emirato. Gracias por descubrirlo y por redescrubrir siempre a Carroll, el implacable lógico matemático mediante Alicia y otros personajes no tan locos como el Sombrerero. Es tiempo de saber, lo cual lleva a callar, eso es lo lamentable. Pero no se consolida una democracia hasta que el "free speech", la libertad de expresión deje de ser una floritura, para convertirse en una necesidad real. Y hasta que se acepte como real, no como retórico, lo que se expoone y se demuestra.Y no, simplemente, que se entierre esa libertad bajo los viejos cartapacios de la patria. O junto a los 34.000 (o más) cadáveres de espñaoles echados al Pudridero del ahora llamado Valle de Cuelgamuros. Un mero ejemplo.
Tú lo dices bien, Patricia, con el Sombrerro Loco de Carroll:"Si no piensas, cállate". Y si te callas no pienses, o al menos no vale la pena lo que piensas.

Ahora toca Black Friday,Adviento... Cielos, ¿adónde vamos?
Pues al país de Adnde, ¿dónde si no? Adonde nunca pasa nada de verdad.Se aplaza.

Un abrazo
L.